MADRE, EN UNO DE SUS 365 DIAS DE CADA AÑO
Nadie ni nada aparece en esta vida sin su recepción inicial a la luz , al amor, a la entrega sin condiciones, para que podamos “ser”.
Todo elogio queda poco, escaso, para definirla , porque resulta difícil explicar el “todo” desde nuestras primeras miradas, nuestro caminar en esta vida, hasta que somos adultos. Lo importante es sentirla, disfrutar de esa plenitud que nos acompaña hasta el fin de nuestros días y luego llega el feliz reencuentro, con aquella persona que nos dio lo máximo y que nos perdona todo.
Como nuestra Virgen María , nuestra Madre.
Con el gesto, la actitud, la palabra diaria, le demostramos esa retribución de amor, que –tal como la aprendimos de ella- debemos , como norma de vida, entregar a todos los demás, sin excepciones. Ese y no otro es el propósito : replicar su ejemplo de amor .
Un amor puro que es : gratuito , pues se entrega sin esperar recompensa, espontáneo , aparece porque aparece sin obligación alguna, generoso , quiere lo mejor para el otro aún a costa de propio bienestar y también es responsable, porque voluntariamente asume trabajar y esforzarse por el otro, lo que además incluye en una madre saber decir que “no”, como es cuando se siembra y cultiva para bien. Ese es el amor.
Nuestro saludo cariñoso a todas las Madres en el Colegio y del mundo, es éste su Día, que debemos replicara cada día de cada año de nuestras vidas.
Afectuosamente,
Familia Colegio Providencia de Antofagasta
11
mayo